lunes, 27 de noviembre de 2017

ESCUELAS CHANGEMAKER

Todos queremos que nuestros hijos sean los mejores; los mejores en matemáticas, en pintura, ciencias sociales... que hablen muchos idiomas, cuantos más mejor, que sepan comportarse, que no molesten mucho, que canten bien o toquen algún instrumento, que sean los mejores en algún deporte, y si es en varios pues mejor...

Pero muchas veces se nos olvidan una serie de habilidades que bajo mi punto de vista son tan o más importantes que saber hacer bien una raíz cuadrada, situar un país o entonar correctamente una nota.
Estas son la habilidades sociales, que no son más que el conjunto de conductas que nos permiten interactuar y relacionarnos con los demás de manera satisfactoria y efectiva.

Estas habilidades están presente en nuestro día a día y a veces no nos damos cuenta de la importancia que tienen y las pasamos por alto a la hora de educar a nuestros hijos.

Aunque no nos demos cuenta, existe una importante relación entre la competencia social de la infancia y la adaptación social y psicológica. La baja aceptación personal, el rechazo o el aislamiento son consecuencias de no disponer de destrezas sociales adecuadas.

Tenemos que tener muy presente que las habilidades sociales se forman en el hogar pero influyen muy directamente en la escuela, y que la carencia de estas dificulta el aprendizaje.
Si queremos niños que cambien la sociedad, debemos enseñarles a escuchar, a hacer preguntas, a dar las gracias, a iniciar y mantener conversaciones, a presentarse o hacer cumplidos.
Todas estas habilidades sociales y muchas más las tienen en cuenta las ESCUELAS CHANGEMAKER, que abogan por una metodología alternativa donde los niños sean el centro de la educación. Quieren que alumnos y familias sean parte activa del cambio social aprendiendo y desarrollando habilidades como la empatía, el liderazgo y la colaboración para construir una vida mejor para si mismo, su familia, amigos y entorno.

Afortunadamente, muchos padres ya no queremos ese sistema educativo que ha quedado antiguo, en algunos casos, hasta rancio, donde el niño no tiene oportunidad de decidir sobre si mismo, donde los alumnos están a un nivel inferior que los profesores o donde no se les escuche. Donde los niños no tienen la opción de explorar ya que tienen que estar sentados durante varias horas en una silla, o donde cuando terminan su jornada, tienen que seguir haciendo tareas en casa para "afianzar conceptos", o donde se siguen midiendo los conocimientos del 1 al 10.

Por suerte, hay muchos centros educativos, y tenemos "libertad" para elegir que tipo de educación queremos para nuestros hijos, aunque muchas veces tengamos que decantarnos por un colegio concertado o privado, ya que la educación pública aún dista mucho de lo que algunos padres consideramos "de calidad".

"La tarea más difícil en la enseñanza es saber cuando debemos intervenir y cuando debemos cerrar la boca, o sea, casi todo el tiempo".


Las escuelas de Infantil y Primaria, bajo mi punto de vista deben fomentar el juego, la actividad espontanea y la experimentación no dirigida, y promover el pensamiento reflexivo, critico, autónomo y creativo. Pero todo esto es una tarea de adultos y que conlleva mucho esfuerzo y no se hasta donde estamos dispuestos por mejorar la educación y por tanto la sociedad futura en la que van a vivir nuestros hijos.

Todos estos cambios repercuten en nuestra sociedad presente, pero también en la futura y es ahí donde tenemos una gran responsabilidad. En nuestras manos está educar niños respetuosos con su entorno más cercano.

"Los emprendedores sociales no se conforman con dar un pez, ni con enseñar a pescar. No descansarán hasta que no hayan revolucionado la industria pesquera". Bill Drayton

Pero no todo es negativo. En el mundo hay 230 ESCUELAS CHANGEMAKERS donde enseñan a los niños a ser personas con actitud y con una determinada forma de pensar y comportarse. Niños con curiosidad, niños con mente abierta, críticos, con empatía para poder tomar partido y resolver conflictos...

En España, en la actualidad hay 7 ESCUELAS CHANGEMAKERS, homologadas por la fundación Ashoka que apuesta por una sociedad en la que todas las personas descubran su potencial para mejorar el mundo y se sientan con la capacidad para lograrlo con éxito.
Para ser sincera, este modelo de educación me parece la mejor manera de enseñar a nuestros hijos, pero nunca había oído hablar de estos colegios hasta que asistí a un "ECOENCUENTRO" organizado por El Corte Inglés.

Todo lo que nos contaron, me pareció muy interesante y pude conocer iniciativas tan importantes como la que está llevando cabo Unicef, Luces para aprender o la recogida de juguetes para niños más desfavorecidos.

Pero especialmente, me llamó mucho la atención la actuación del Colegio Público "Ramón y Cajal" en Alpartir (Zaragoza). Es uno de los 7 colegios changemaker que hay en España, donde se cambian por completo las reglas del juego.

Se trata de un colegio de Infantil y Primaria con 34 alumnos y 5 profesores, donde se potencia el trabajo por proyectos en todos los niveles y ha hecho cambios en el método de aprendizaje tradicional. Algunos ejemplos:

⦁ Aprenden matemáticas con legos
⦁ Las ciencias naturales a través de los huertos que ellos mismos cultivan o a través del observatorio que han habilitado.
⦁ Ciencias Sociales: Intercambio de experiencias con los padres y abuelos.

Porque si, en este colegio, los padres y los abuelos, y prácticamente todo el pueblo tienen un papel muy importante. Todos participan activamente en este proyecto y hasta los propios alumnos se reúnen en asamblea con los responsables políticos del pueblo para aportar sus ideas de mejora o sus sugerencia o preocupaciones.

Al terminar los estudios de Primaria, pasan al Instituto donde su adaptación es más que satisfactoria. Los alumnos de este proyecto tienen mucha más facilidad a la hora de trabajar en grupo o expresarse oralmente, por contrapartida, su formación en nuevas tecnologías es bastante mejorable, pero bajo mi punto de vista, tienen una edad ideal para ir adquiriendo esa habilidad, ya que la base que tienen es bastante buena.

Así que para terminar este post os dejo con una reflexión personal que me imagino que con otras palabras, alguien habrá expuesto en otros foros:

Dotemos a nuestros hijos de herramientas y habilidades sociales para que le sea más fácil adaptarse a la sociedad que ha cambiado y va a seguir haciéndolo.